domingo, 5 de septiembre de 2010

Astronautas espías.

En la década de los 60, las que por aquel entonces eran las dos grandes potencias mundiales a todos los niveles, Estados Unidos y la Unión Soviética, protagonizaron una dura competición por liderar la carrera espacial. Pero lo que nunca llegó a trascender es que su verdadero objetivo era conseguir desarrollar programas de vuelos espaciales encubiertos para poner en órbita observatorios militares con tripulación especializada en labores de espionaje y tácticas bélicas. Las llamadas Estaciones Orbitales Tripuladas, conocidas bajo las siglas MOL en el caso norteamericano y con el nombre de Almaz para los soviéticos, concentrarían durante estos años los esfuerzos de los dos países, feroces rivales también en este nuevo campo de batalla. Odisea les presenta este magnífico documental donde, gracias a un valioso material de archivo y declaraciones de ex miembros de las tripulaciones de ambos bandos, analizaremos lo que pudo haber ocurrido si ambas superpotencias hubieran alcanzado el pleno desarrollo de sus Estaciones Orbitales Tripuladas.